La corregulación emocional es una poderosa herramienta que puede transformar los desafíos cotidianos en oportunidades de aprendizaje emocional para nuestros pequeños. En este blog, exploraremos cómo mantener la calma durante las pataletas puede ser clave para la corregulación, ayudando a los niños a comprender y gestionar sus emociones. Aquí te presentamos tres consejos prácticos para implementar en esos momentos intensos.

1.⁠ ⁠Mantén la Serenidad:

En medio de una pataleta, los adultos actúan como faros emocionales para los niños. Cuando mantenemos la calma, les proporcionamos un ancla segura en medio de la tormenta emocional. Respira profundamente y recuerda que tu tranquilidad actúa como un modelo a seguir, enseñándoles a manejar las emociones fuertes.

2.⁠ ⁠Escucha Activa:

En medio de una pataleta, los niños pueden sentirse abrumados y con dificultades para expresar lo que sienten. En lugar de hacer preguntas que requieran una reflexión cognitiva, simplemente acompaña sus emociones. Presta atención a sus gestos, tono de voz y lenguaje corporal. La prioridad en ese momento es la conexión emocional. Posteriormente, cuando la calma regrese, podrás retomar la conversación para comprender mejor lo que ocurrió y cómo pueden enfrentar juntos esos desafíos. Este enfoque permite validar sus emociones y construir un puente hacia una comunicación más profunda.

3.⁠ ⁠Ofrece Alternativas Positivas:

En lugar de simplemente decir «no» o «deja de hacer eso», guía a tu hijo hacia alternativas positivas. Por ejemplo, si están frustrados porque no obtienen lo que quieren, enséñales a expresar sus necesidades de manera asertiva, repitiendo juntos la expresión correcta. Esto no solo ayuda en la gestión de la situación actual, sino que también construye habilidades emocionales a largo plazo.

Recuerda, la corregulación emocional es un viaje continuo. Al proporcionar un entorno emocionalmente seguro y practicar estos consejos, estás construyendo las bases para que tus hijos desarrollen habilidades de autorregulación en el futuro. ¡Mantén la calma y construyamos juntos puentes emocionales sólidos!